En Neuquén: política y religión para adueñarse de votos. La experiencia del ex gobernador Sobisch y el pastor Nuñez para acercarse a una definición de "trata religiosa".
Todo partido político que maneja poder y recursos tiene una
serie de estrategias para capitalizar votos. Una de ellas es recurrir a las
iglesias de origen protestante, hoy popularizadas como sectas evangélicas.
Jorge Sobisch, durante su última gobernación, recurrió a la
compra de votos de fieles protestantes. Como vehículo utilizó a Héctor Nuñez,
un apóstol evangélico, cargo que en la jerarquía evangélica es un grado más que
un pastor.
El apóstol
fundó Buena Tierra, una asociación civil por donde canalizaba el dinero. Él era
el encargado de repartirlo entre los pastores de Neuquén. Quienes recibían el
pago argumentaban que Dios les había indicado que Sobisch era el candidato a
elegir.
Política religiosa
Desde el 99’, las prácticas que comprometen al Estado y a
evangélicos se tornaron comunes en Neuquén, se puede medir en función del
crecimiento numérico de estas iglesias. “El mejor militante que puede tener un
partido es un evangélico. No te deja en paz, se mueve casa por casa. El pastor
baja línea y todos los que están abajo obedecen. Son soldaditos.”, dijo una
fuente, un militante político identificado con el Partido Intransigente.
Un ex funcionario provincial de Desarrollo Social explicó
cómo funciona la maquinaria electoral: “Pastor X dice que tiene X personas y
negocia. Él se encarga de llevarlos a votar, a cambio se le otorgan dinero,
terrenos y material de construcción”. Esto se complementa con las palabras del
mencionado militante: “Entre pastores y políticos tienen confianza ciega. El
MPN tiene estructuras muy aceitadas. Ellos pueden hacer un control más estricto
que el resto de los partidos el día del sufragio”.
Núñez y Buena Tierra
A nivel provincial y municipal se creó la subsecretaría de
Credos, para regularizar la situación de los centros religiosos. Durante el
gobierno de Jorge Sapag, Credos reunió a los representantes evangélicos y
descubrió desperfectos de la gestión de Sobisch. El ex funcionario explicó que
el ex gobernador “buscó trasformar pastores en punteros políticos para comprar
el voto de sus congregaciones. Se logró, porque estas instituciones son
jerárquicas y el pastor es quien toma las decisiones”.
Hace doce años, Núñez fundó Buena Tierra, con domicilio en
Maestros Puntanos 760. La asociación civil fue el marco legal para la
distribución de fondos públicos. El apóstol ofrecía sumas de dinero y los
beneficiarios no debían firmar nada.
Posteriormente, comenzaron los reclamos de pastores que no
recibieron el aporte económico. Uno de ellos es de Chos Malal y amplió la
denuncia: “el dinero era otorgado a los afines a Nuñez, ni siquiera existía una
actitud equitativa con los demás pastores”, afirmó y continuó: “Núñez daba la
plata en sobres cerrados, ellos ‘diezmaban’ y se lo devolvían”. El diezmo
consitía en que el apóstol se quedara con el 10% del dinero de cada sobre.
Quienes no recibieron el dinero acusaron a Nuñez de “prostituir la Iglesia”.
Esta situación potenció la reproducción de pastores con poco
rebaño. El año pasado se contabilizaron 282 iglesias evangélicas solo en
capital.
¿Quién es Núñez?
Núñez vive en el barrio Valentina Sur. Su casa se destaca
del resto por su elegancia y gran tamaño. A una cuadra, se encuentra su
iglesia. No tiene ningún cartel que la identifique y no hay signos de que
alguien la habite. Allí, funciona el Centro Familiar de Desarrollo Integral
(CeFaDi). Según el apóstol, el lugar es chico, pero tiene la intención de
expandirse en Venezuela, con el objetivo de convocar ¡3 millones de personas!
¿Cuál
es la relación con los gobernantes?
Núñez:
Nunca recibimos ayuda económica del Estado. Sólo recuerdo una vez, durante el
gobierno de Sobisch, en que nos facilitaron 50 colectivos para viajar al
Encuentro de Iglesias Evangélicas en Las Lajas.
¿Existío
diálogo entre usted y Sobisch?
Nuñez:
Nunca hubo buena relación, ellos quieren manipularte todo el tiempo. Sin
embargo, durante el encuentro en Las Lajas se dio una situación muy amena. El
gobernador se presentó y, sin que nadie le dijera que lo hiciera, dio un
discurso.
Núñez es director de Misiones Internacionales y por ello
tuvo que viajar muchas veces al exterior. “Este año fueron tres y todo salió de
mi bolsillo. Tuve que pedir varios préstamos de 15 o 20 mil pesos”, dijo.
También, contó que fue llamado por Dios a ser apóstol. “Esta
función tiene como principal característica ejercer el liderazgo. El pastor
está más con la gente, en cambio el apóstol va adelante, por ejemplo se
entrevista con un gobernador”, explicó.
Testigo vivencial del entorno religioso
Una ama de casa del barrio relató cómo muchas veces no había
reparo en que, durante las congregaciones, se dijeran frases como “hay que
acompañar al candidato Sobisch. Él va a hacer que nuestra iglesia crezca, vamos
a vivir mejor” o “ayer tuve un sueño en que el Señor me habló, me dijo que hay
que votar a Sobisch”. Todos terminaban con el reiterado “Dios nos bendijo con
él, hay que seguir apoyándolo”.
*Una vieja investigación realizada para la cátedra de Periodismo de Investigación de la Universidad Nacional del Comahue. No había sido publicada en la web, hasta el momento. Intentó, pero los directivos de Diario Rio Negro no quisieron. Se realizó a mediados del año 2012.